[Este post es parte de la serie Un Arsenal para el Estudio de la Biblia, que puedes encontrar completa aquí]

Hasta el momento, hemos revisado distintos tipos de recursos que nos pueden ayudar con un estudio básico de la Biblia. Pero hay ciertas ocasiones, especialmente si nos encontramos en alguna labor de enseñanza o investigación profunda, en las cuales el recurso más completo que hemos visto en esta serie -la Biblia de Estudio- no es suficiente. ¿Cuál es el siguiente paso desde aquí? Debemos consultar recursos dedicados específicamente a un estudio más completo. Entre ellos encontramos las Concordancias, los Atlas y las Armonías bíblicas.

Concordancias

Una Concordancia es un recurso que cumple la misma función que vimos al principio de esta serie: ubicar otros pasajes en la Biblia que contienen el concepto en el que estamos interesados. No obstante, hay una diferencia sustancial entre una Biblia con Concordancia y una Concordancia propiamente tal. Mientras que la primera incluye un apartado de conceptos, la segunda es un libro completamente dedicado a este objetivo. El hecho de que una Concordancia suele ser tanto o más grande que una Biblia de Estudio es una buena muestra de la enorme cantidad de información que contiene. La Nueva Concordancia Strong Exhaustiva llega al punto de listar cada palabra utilizada en la Biblia Reina Valera 1960.

La mayoría de las Concordancias suelen ser literales, es decir, identifican los pasajes que contienen la palabra exacta o con mínimas variaciones. No obstante, como mencioné en el post sobre la Biblia corriente, existen Concordancias -como la Concordancia Temática Holman- que permiten buscar referencias a un concepto sin importar las palabras que se usen para este fin.

Ambos tipos nos permiten tener un buen pie de apoyo para iniciar nuestro propio estudio bíblico acerca de un concepto específico, como la justicia o los milagros. ¿El beneficio? Contexto. Una Concordancia nos permite conocer qué más enseña la Biblia en general sobre el concepto que estamos estudiando, lo cual complementará, corregirá y perfeccionará nuestro entendimiento de ese concepto.

Atlas Bíblico

De igual manera, los Atlas son versiones glorificadas de los humildes mapas que podemos encontrar en las Biblias corrientes. En ellos encontraremos una colección más grande de mapas, y una mayor cantidad de información sobre historia y geografía que complementarán el estudio de nuestro pasaje.

Esta clase de recursos no sólo nos ayuda a visualizar mejor el mundo antiguo sobre el cual estamos leyendo, sino que incluso nos puede ayudar a resolver dificultades en la comprensión de un texto. ¿Por qué la Biblia habla de "subir" a Jerusalén? Un Atlas nos ayudará a saber el motivo. ¿Por qué los cristianos de Corinto luchaban contra tantas tentaciones? Los datos históricos y geográficos de estos recursos nos permitirán obtener una respuesta. ¿Por qué Jesús les habla en formas tan particulares a las iglesias de Apocalipsis? Los Atlas tienen bastante que decirnos al respecto (puedes ver un ejemplo práctico de la importancia de la geografía para estos pasajes en esta serie).

Armonías Bíblicas

Estos recursos (no muy conocidos) resultan útiles cuando llega la hora de estudiar eventos que son descritos en más de un lugar en la Biblia, como la vida de Jesús en los Evangelios o las aventuras (o más bien, desventuras) de los reyes de Israel y Judá en el Antiguo Testamento. Las Armonías Bíblicas ponen lado a lado todos los pasajes relevantes para un evento, de manera que tenemos delante nuestro todas los ángulos necesarios para entender mejor lo ocurrido.

Como demostración, si tienes cuatro Biblias corrientes (o utilizas algún recurso electrónico que tenga esta capacidad), haz la prueba de abrirlas en el episodio de la Alimentación de los 5000 (puedes comenzar desde Juan 6 y encontrar en las referencias cruzadas los pasajes correspondientes a los otros tres Evangelios). Sin duda, entenderás la ventaja de tener todas las perspectivas a la vista.

Estas herramientas complementarias nos abren un mundo más amplio para nuestro estudio. Sin embargo, esto es sólo el principio. Existe mucha más riqueza disponible a través de otros recursos que descubriremos en esta serie.

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