(Este post es parte de la serie Un Breve Acercamiento a Apocalipsis, que puedes encontrar completa aquí)

Luego de aprobar las cualidades positivas de la iglesia en Éfeso, Jesús pasa a diagnosticar sus problemas, corregir su curso y animarla con una promesa. Si prestamos atención, estos pasajes nos proporcionarán importantes lecciones prácticas para nuestra vida cristiana.

Reproche (Apocalipsis 2:4)

"Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor"

Aún frente a las cuatro características positivas que vimos anteriormente, Jesús tiene algo que rechazar en la vida de esta iglesia, y es el hecho de que ha dejado su "primer amor". No se nos explica en qué sentido especifico del amor ellos están fallando; podría ser una falta de amor hacia las personas, un rechazo que creció producto de su oposición a las falsas enseñanzas y la persecución de la sociedad, pero también podría ser un enfriamiento del amor que estaban profesando hasta ahora al Señor (el que se menciona en el v. 3) o un abandono dramático de aquel que le habían mostrado inicialmente, lo que podría haberse visto traducido en hacer las cosas correctas (comportarse de acuerdo a los valores cristianos y defender la doctrina) pero de una manera mecánica y sin la motivación que Dios deseaba. En este sentido, el reclamo de abandonar el primer amor suena similar a la denuncia de Jeremías contra Israel (Jeremías 2:2-5), y nos recuerda la advertencia que los profetas del AT hacen contra la tendencia a practicar un comportamiento correcto en lo exterior, sin la intención correcta en el corazón (Oseas 6:6).

Cualquiera que sea el caso, esta falta de amor es una debilidad demasiado crucial como para que pase desapercibida. El amor no sólo es la primera virtud en la lista del fruto del Espíritu (Gálatas 5:22), sino que su importancia es tal que Pablo declara en 1 Corintios 13:1-3 que sin él, aún los dones y las obras más poderosas son inútiles.

Lección práctica: De aquí, debemos aprender dos cosas: En primer lugar, debemos tener en cuenta que no basta que hagamos ciertas cosas bien en nuestra vida para "tapar" otras áreas que no están tan bien. El Señor reconoce lo saludable en Su Iglesia, pero eso no significa que deje de ver lo que está dañado y enfermo. Esto, por lo tanto, nos impulsa a buscar Su gracia en todas las áreas de nuestra vida, para ser cristianos integrales.

En segundo lugar, debemos recordar lo necesario de cuidarnos del extremo del activismo vacio y sin corazón. El amor a Dios y al prójimo, tal como lo estableció Jesús (Marcos 12:30-31), es la primera prioridad en la vida cristiana, y debe ser el motor de todo lo que hagamos para extender el reino.

Recomendacion (Apocalipsis 2:5)

"Recuerda, por tanto, de dónde has caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto a ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido."

Lo que Jesús aconseja a la Iglesia es hacer memoria y tomar conciencia de la diferencia que hay entre el comienzo de su caminar y su estado actual. Por los comentarios de Pablo deducimos que originalmente los efesios eran famosos por su amor y su fe (Efesios 1:15); ahora, ellos deben volver a esa misma medida de virtud, no sólo en intención y sentimiento, sino también en acción, comportándose tal como lo hacían entonces (haciendo "las primeras obras"). Podría ser, como dijimos, que en el v.3 el Señor esté haciendo un "reconocimiento a la trayectoria" de la iglesia más que describir su situación actual, y que ellos deban regresar a esta misma clase de obediencia amorosa que se describe, y que habían descuidado.

Si esto no sucede, la advertencia del Señor es que Él quitará el candelero de su lugar, en otras palabras, que la iglesia desaparecerá. La arqueología nos confirma que, lamentablemente, esto fue así. Con el tiempo la ciudad de Efeso fue trasladada a un lugar distante unos tres kilómetros, y sólo sobrevive de ella un pequeño poblado llamado Ayasaluk. El sitio que antes ocupaba ahora se encuentra desierto.

Lección práctica: Podemos ver en forma práctica el énfasis que mencionamos en la introducción a estas cartas sobre nuestra madurez y crecimiento en santidad. Jesús esperaba que la iglesia de Éfeso fuera creciendo, no sólo en obras y doctrina correcta, sino también en amor. La vida del creyente debe ser una de aumento y de progreso (1 Pedro 2:2; Romanos 6:22; 1 Corintios 15:58; Efesios 2:19-21; 4:15-16; Colosenses 1:9-10, etc.) por lo que si nos vemos disminuyendo en algún aspecto, esto debe ser motivo de examen, reflexión y arrepentimiento cuando sea necesario.

Promesa (Apocalipsis 2:7)

"El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. Al que venciere, le daré a comer del árbol de la vida, el cual está en medio del paraíso de Dios."

Aquí aparece por primera vez la promesa "al que venciere", que marcará la pauta para el resto de los mensajes a las iglesias. El concepto de "vencer" -gr. nikaó- parece ser importante dentro del pensamiento de Juan, ya que sus escritos concentran 20 de las 24 veces que se usa en todo el NT. Desde su perspectiva, vencer significa derrotar a la maldad, y específicamente, perseverar en la fe superando los distintos desafíos que se presenten (Apocalipsis 15:2), desde la persecución hasta la tentación. Cristo, por lo tanto, es el vencedor por excelencia (Juan 16:33; Apocalipsis 3:21; 17:14) y la fuente de victoria de todos los que crean en Él (1 Juan 4:4-5; 5:5; Apocalipsis 12:11). Por otro lado, aunque Pablo no recurre tanto a este término, sí utiliza en varias ocasiones vocabulario de combate para referirse a la vida cristiana (Efesios 6:12-17; 1 Timoteo 6:12; 2 Timoteo 2:3-4; 4:7).

Lección práctica: El mensaje de Dios a través de los apóstoles parece ser enfático al decirnos que la vida cristiana es un conflicto, por lo que no deberíamos esperar que nuestro caminar sea fácil o esté libre de desafíos. Ser cristiano requiere esfuerzo, determinación y, como hemos visto antes, paciencia, la capacidad de resistir el sufrimiento.

Finalmente, la promesa que aparece mencionada como recompensa para aquel que logre la victoria en la vida cristiana es muy significativa: el "árbol de la vida" identificado como la fuente de vida eterna en Génesis 2:9, y el Edén mismo, serán restaurados y abiertos por Jesús para el creyente (se deduce que para que el creyente acceda al fruto que está en el centro del paraíso, el Edén mismo también debe estarle permitido). Podemos ver un contraste entre las luchas de los efesios y la promesa que ellos reciben, que también es para exhortación nuestra: los que sigan adelante, conquistando las tentaciones y resistiendo las dificultades, tendrán la oportunidad de disfrutar la vida eterna, y el lugar de comunión, descanso y disfrute verdadero que Dios creó para el ser humano.

Recursos Consultados

Robert Jamieson, A. R. Fausset y David Brown, Commentary Critical and Explanatory on the Whole Bible, vol. 2 (Oak Harbor: Logos Research Systems, Inc., 1997).

George Beasley-Murray, "Revelation", en New Bible Commentary: 21st Century Edition, eds. D. A. Carson et al., 4th ed. (Leicester, England; Downers Grove, IL: InterVarsity Press, 1994).

Faithlife Study Bible, eds. John Barry et. al. (Bellingham, WA: Lexham Press, 2012, 2016).

"Nikaō" en The Lexham Bible Dictionary, ed. John Barry (Bellingham, WA: Lexham Press, 2016).

Charles Rochedieu, Los Tesoros del Nuevo Testamento (La Aurora: Buenos Aires, 1975)

CSB Study Bible: Notes, eds. Edwin A. Blum y Trevin Wax (Nashville: Holman Bible Publishers, 2017).

A menos de que se indique lo contrario, todas las citas bíblicas son tomadas de la versión Reina Valera Contemporánea (RVC)
Foto: Odeón (pequeño teatro) en Éfeso, Turquía por Sailko en Wikipedia (EN)

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