Mientras termino de preparar el análisis crítico de las enseñanzas de los Testigos sobre la muerte y el más allá, quisiera dejarlos con algunos pensamientos para considerar. Acerca de la próxima entrada, puedo adelantarles que está centrada en el tema del infierno, que el libro menciona brevemente y desecha con la misma rapidez. Pero con todo lo incómodo que es hablar del juicio eterno, y sus consecuencias para quienes no creen en Jesús, es algo que como cristianos no podemos esquivar, porque al final de cuentas tiene sentido. Las siguientes citas nos invitan a reflexionar un momento en la realidad de la maldad humana, y en lo justo que será el juicio de Dios:
"Jesús no dijo, 'Vayan y díganle al mundo que está muy bien'" -- C.S. Lewis, escritor, entrevistado por Sherwood Wirt, como se cita cita en el libro God in the Dock
"No te cuides de ningún hombre más que de ti mismo; llevamos nuestros peores enemigos dentro nuestro" -- Charles Spurgeon, pastor, como se cita cita en el libro Essential Works of Charles Spurgeon
"El problema con el mundo es que culpa de los problemas a cualquier otra cosa excepto el pecado, e identifica la salvación con cualquier otra cosa excepto con Dios" -- Tim Keller, pastor y escritor
"Algunos de nosotros hemos sido atraídos y seducidos por una versión del Evangelio que apela a nuestro egoísta deseo de éxito, prosperidad y bendición. Como resultado, muchos han cambiado la verdad del Evangelio por una mentira; hemos llegado a ver el Evangelio como una promesa de una mejor vida en lugar de una oferta de rescate de la justificada y merecida ira de Dios" -- Jim Warner Wallace, detective y apologista, en su blog "Is the Gospel a Pair of Sunglasses or a Bulletproof Vest?"
"Así que cuando alguien pregunta si puede o no rechazar un infierno eterno y ser salvo, lo más importante de intentar discernir para mi es la razón subyacente por la cual esta persona está haciendo una pregunta así. La mayor parte del tiempo, las personas rechazan las doctrinas duras como esta debido a una alergia emocional hacia ellas. Ellos terminan poniendo a Dios en el banquillo y se atreven a dictar sentencia. "¡Nunca creería en un Dios que permite que la gente sufra en el infierno por toda la eternidad!" Como dije en el comienzo, no es que no empatice con estas reacciones emocionales (el Señor sabe que lo hago), pero ¿realmente quieres la alternativa? ¿Quieres creer en un Dios que al final se inclina ante tus preferencias? ¿Quieres que Dios busque tu permiso antes de poder declarar que algo es cierto? En este punto, es mucho más importante tratar con tu definición de lo que significa ser 'Dios'" -- C. Michael Patton, teólogo, en su blog "Can I Reject an Eternal Hell and Still be Saved?"
"¡Religión, opio para el pueblo! ...Un verdadero opio para pueblo es una creencia de que nada existe después de la muerte -la enorme tranquilidad de pensar que por nuestras traiciones, avaricia, cobardía, asesinatos, no vamos a ser juzgados" -- Czeslaw Milosz, poeta y premio Nobel, en su ensayo "The Discreet Charm of Nihilism"
"Solía pensar en que la ira era indigna de Dios. ¿No es Dios amor? ¿No debería estar el amor divino más allá de la ira? Dios es amor, y Dios ama a cada persona y cada criatura. Eso es exactamente por qué Dios está indignado contra algunos de ellos. Mi última resistencia a la idea de la ira de Dios murió como una víctima de la guerra en la antigua Yugoslavia, la región de la cual vengo. De acuerdo a algunas estimaciones, 200.000 personas fueron muertas, y más de 3.000.000 fueron expulsados. Mis villas y ciudades fueron destruidas, mi gente bombardeada día tras día, algunos de ellos brutalizados más allá de la imaginación, y no podía imaginar a Dios no estando indignado. ¡O pensemos en Ruanda en la última década del siglo pasado, donde 800.000 personas fueron mutiladas hasta la muerte en cien días! ¿Cómo reaccionó Dios a la masacre? ¿Consintiendo a los causantes como lo haría un abuelo? ¿Rechazando condenar el baño de sangre, y en su lugar afirmando la bondad básica de los responsables? ¿No estaba Dios ferozmente enojado con ellos? Aunque solía quejarme sobre la indecencia de la idea de la ira de Dios, llegué a pensar que tendría que rebelarme en contra de un Dios que no estuviera furioso al ver la maldad del mundo. Dios no está furioso a pesar de ser amor. Dios está furioso porque Dios es amor" -- Miroslav Volf, teólogo, en su libro Free of Charge
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